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Se avecina la recta final para Los Toros de Camagüey.

Tendrán por delante cuatro semanas muy complicadas teniendo en cuenta a los rivales que habrán de enfrentar: Avispas santiagueras, Gallos espirituanos, Cocodrilos matanceros y Tigres avileños.

Nunca me ha gustado aferrarme a la historia pues los equipos de hace 10 años atrás nada tienen que ver con los actuales conjuntos de estos tiempos. Considero absurdas esas frases al estilo de: “Villa Clara siempre se le ha atravesado a Santiago”, por ejemplo. Pues eso pasaba hace años cuando los equipos eran otros y los peloteros eran otros. Son solo frases …han prevalecido en el tiempo.

Hace un año, Marino Luis tuvo un complejo debut: tuvo el reto de intentar ganar 15 partidos en 20 presentaciones, y lo logró , llevando al equipo a obtener 39 triunfos que le dieron estrechamente para clasificar y desbancar a Mayabeque, convirtiendo a Los Toros en “el octavo pasajero” y logrando que el Cándido González se tornara un manicomio en el juego 75. Este año , Marino no cuenta con Góngora, Sorís, Márquez o Fernando Ramos para lanzarse al espacio de la pos temporada. Por solo mencionar a 4 lanzadores que fueron claves en aquella clasificación. Y , lamentablemente, Marino Luis no es mago: es un hombre de Béisbol.

Pero Marino no está solo. Tiene a Darío Cid que no le pierde pie ni pisada. Mientras que Infante y Huerta intentan extraer el máximo de lanzadores que aún no están preparados para estos menesteres. Y Roberto Montero, sigue afinando la batería. Todo el equipo de dirección anda buscando “la fórmula”.

La fórmula para clasificar…es sencilla de decir y es complicada de lograr: les explico.

Lo primero es lo primero: ¿Cuántas victorias necesitamos?.

En caso de que Camagüey lograra la hombrada y pudiera llegar a las 40 victorias, aún no habría nada asegurado. Sobretodo , con una tabla tan reñida como se ve hoy. En la 62 Serie se necesitaron 39 sonrisas para llegar a puerto seguro y en la 60, ni con 41 triunfos se pudo clasificar.

A Camagüey le quedan 18 juegos por delante y la única fórmula que tiene en sus manos es la de ganar al menos 11 para poder llegar 40 victorias. Si tenemos en cuenta que en los últimos 10 partidos solo pudimos lograr un balance de 2-8, parece muy improbable que podamos ganar 11-7 en los próximos 18.

Así que los Toros se tendrán que olvidar y borrar de sus mentes que Matanzas y Santiago de Cuba han sido las verdaderas “bestias negras” de nuestros equipos. Los que peinamos canas sabemos de que se habla aquí. Entre Avispas y Cocodrilos, les han negado a los Toros el camino al anhelado trofeo en 7 ocasiones. Son los máximos verdugos para los nuestros. Habrá que olvidarse de la historia. Será el primer punto para aspirar a la tan difícil clasificación.

Lo otro : un crecimiento extraordinario del rendimiento de 4 lanzadores que serán los que se lleven la gloria o los que asuman la responsabilidad de la caída como abridores de una rotación que se ha quedado sin estructura : Yusmel Velazquez, Giorvis López, Mario Marzo y la última esperanza: Marlon Soriano. ¿Quién diría que nuestro As de pitcheo, sería un descarte de un equipo rival?.

Marlon Soriano llevaba mucho tiempo ansiando que le dieran la bola como abridor. Se la dieron, y cumplió . Se creció contra Las Tunas al solo permitirle 3 carreras limpias al robusto equipo de leñadores. Si en alguien hay cifradas las esperanzas, es en él. Pero no serían suficientes sus victorias y las de Velázquez.

Tendrá Marino que hacer una modificación a su rotación de 5 abridores y dejarla en 4 abridores cada 5 días. De esa manera Yusmel Velázquez y Giorvis López podrían iniciar 5 juegos cada uno mientras que Mario Marzo y Marlon Soriano podrían hacerlo en 4 ocasiones.

El zurdo Veranes estaría también a la espera de un resultado positivo, inesperado y revelador. Yusmel Garcés intentando dar lo mejor de sí mismo , un tanto agotado ya por lo trabajoso de la campaña en este final de carrera , para ver si se logra lo que muy pocos creen posible.

La defensa tendrá que ser inmaculada , pues en caso de que no sea hermética y precisa, el trabajo de los lanzadores no podrá rendir frutos. Los bateadores que vienen no son tarea fácil. Y además de fildear limpio, será importante poner en práctica “los piscinazos”.

Cinco partidos contra los Gallos y sus lanzadores que habitualmente “nos enredan”, aunque anden de capa caída. Son capaces de neutralizar a Los Toros con pasmosa facilidad. Roberto Montero con su vasta experiencia y su enorme sapiencia tendrá que exprimir a los Toros para que además de bateadores, muestren toda la inteligencia posible frente a un cuerpo de lanzadores bien curtido y de brazos fuertes.

Y por último tres partidos …nuevamente contra los archirrivales Tigres que siempre nos juegan como si estuviéramos en un Play Off. Formidables contrincantes a los cuales, lo de “enemigos íntimos”, les queda como anillo al dedo. No hay un juego frente a los avileños que no nos haga sufrir o gozar. Nada es desabrido cuando se trata de ellos.

Lo de Marino, una vez más …no es tarea nada fácil. No se sabe cuál de las dos campañas es la más difícil. No se sabe si era más complejo ganar 15 juegos de 20 posibles, hace una temporada atrás o ganar 11 partidos en este final de serie con un equipo que por más que lo intenta, está sobrepasando sus verdaderas posibilidades físicas y cualitativas.

Lo del bateo será lo mismo que un “trapiche sin descanso”: Moler, moler y moler. En medio de tantas especulaciones, conjeturas y fórmulas. Solo hay una variante para lograr el objetivo de pasar a la próxima fase:

Defensa inmaculada, bateo sostenido y lanzadores eléctricos.

Y aunque parece el guión de uno de los filmes de “Misión Imposible”, después de aquel verano del 2019, en los juegos Panamericanos de Lima, Perú…ya no hay nada que me parezca insólito.

Así que nada, amigos y amigas…solo nos queda esperar a ver que nos depara este final de suspenso. Por si acaso, se le recomienda tener a mano siempre su botiquín, un vaso de agua, y por si las moscas…un poco de cascarilla.

Viene un enjambre de avispas 🐝. Así que :

Nos vemos en el Cándido. (Con cornetica china incluida, y una ramita de Vencedor).

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