Tras muchos y fallidos intentos, el lanzador camagüeyano finalmente logró insertarse de manera sólida y efectiva en una liga extranjera para de esa manera intentar aumentar sus posibilidades como lanzador profesional, en correspondencia con su talento y calidad.

Como ya es sabido por muchos, la pasada temporada significó el debut de Frank Madan Montejo en la Serie A del beisbol Italiano (División Elite), militando en las filas de la entidad A.S.D. Reggio Rays Baseball, perteneciente a la ciudad de Reggio nell’Emilia.

En aquel momento, y a través del sitio Cubalite.com supimos sobre sus condiciones físicas de la propia voz del couch de pitcheo, otrora serpentinero zurdo de los equipos nacionales cubanos y de la capital, Pablo Miguel Abreu que expresó : 

“…se encuentra bien preparado para empezar la Serie. Aprovechamos una oportunidad que se dio y lo trajimos para que luche aquí. Ya que subimos a la Serie A, necesitábamos un lanzador fuerte que nos ayudara a mantenernos en este nivel y contamos con él. Su contrato es de manera independiente”.

El derecho de 31 años llegaba con la intención de ser uno de los abridores principales y la primordial divisa de no hacer quedar mal a la confianza en él depositada, pero el inicio de su sueño no fue el esperado.

Madan , en sus primeras 4 salidas, no pudo alcanzar sonrisas y se fue cada una de esas veces, frustrado hacia las duchas, al ver como tres de los 4 juegos se le iban de las manos por errores de la defensa y por la pobre producción ofensiva de sus compañeros de equipo.

En su primera aparición lanzó 8 sólidas entradas con 10 ponches, pero bastó una solitaria carrera limpia en contra , para perder el juego.

Una semana después, en 6.2 entradas de actuación y abanicando a 8 rivales, vuelve a perder el juego permitiendo solo dos carreras, ambas limpias. Se repetía la historia e iba apareciendo la frustración.

A la tercera salida, se enfocó en que tenía que hacerlo todo casi perfecto y logró retirar por la vía de los strikes a 11 bateadores en 7 entradas. No permitió carreras limpias, pero la mala defensiva lo llevó a ser el que cargase con la derrota por tercera ocasión consecutiva. Lamentablemente, “la tercera no fue la vencida”. Había que seguir esperando.

Quizás la impotencia o la desesperación, hicieron que perdiera la concentración y en su cuarta apertura firmaba la peor de sus apariciones permitiendo 8 carreras y de ellas 7 limpias en solo 4 entradas de actuación. En ese momento, el peor de todos, Madan, el toro camagüeyano , tocaba fondo a un mes de su debut.

Pero como dice el viejo adagio: “…el éxito es para los que esperan”.

En su 5ta salida, en 7 entradas, el coloso de la calle Horca propinó 15 ponches y solo permitió 2 imparables y un boleto para de esa manera lograr su primera sonrisa en la Serie A, con el dulce sabor de la lechada y el inicio de una larga secuencia de éxitos.

Con foja adversa de 1-3, Frank Madan eslabonó una seguidilla de 9 triunfos al hilo. Logrando una brillante cadena de 48 entradas sin permitir carreras limpias.

Lamentablemente, con balance de 9-3, y a falta de 4 aperturas, vio como su equipo perdió dos juegos, y otros dos no tuvieron decisión para él, a pesar de solo permitir 5 carreras limpias en esos 4 partidos. La mala actuación defensiva y ofensiva de su equipo en esas últimas 4 aperturas, impidió que el estelar lanzador pudiera competir por el liderazgo en juegos ganados al final del torneo.

Aun así, se despidió del campeonato como colíder en juegos iniciados con 18, entre los primeros en juegos ganados (9) y en PCL con 1.38. Además, fue 2do en ponches propinados con 204 K en total, registrando un juego donde regaló 17 ponches en solo 8 entradas (Récord personal) . Además, tuvo 13 juegos de más de 10 bateadores retirados por lo vía de los strikes.

Como dato adicional positivo, solo le batearon para AVE de 191. Apenas permitió 11 extrabases en 18 juegos y 123.2 entradas de actuación (un extrabase cada 11 innings). Mucho más meritoria su faena si mencionamos que: ¡No permitió cuadrangulares! en toda la justa.

En cuanto a su control, se puede catalogar de fantástico, al solo regalar 21 boletos en 18 salidas a razón de 1.5 bases por bolas por cada juego de 9 entradas, y solo propinó dos pelotazos.

Indiscutiblemente, Frank Madan se fue aclimatando a su nuevo escenario de juego, al reencontrarse con las victorias, en la medida en la que iba avanzando la justa…haciendo que se recuperara de un comienzo incierto que muchas veces ha sido fatal para múltiples atletas que no han logrado tomar el segundo aire y tener la concentración necesaria para “auto-relevarse” y lograr salir del mal momento.

Los detalles de esta historia, los motivos que la ocasionaron, las sensaciones que experimentó el fornido atleta y mucho más acerca de lo sucedido en esta temporada lo tendremos próximamente en un nuevo artículo. 

Nos vemos en el próximo episodio…hasta la vista, compay.

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